miércoles, 8 de abril de 2020

F. E. y C. 5º Año

ACTIVIDAD N 4

ÁREA: Formación Ética y Ciudadana CURSOS: Todas las divisiones de 5 TO. AÑO

TURNOS: Mañana Tarde Vespertino

TEMA: ÉTICA EMPRESARIAL

Leer los textos del mismo nombre y responder a las siguientes consignas

1.- Definir “ética empresarial”

2.- Enumerar los aspectos de lo que se ocupa la ética empresarial

3.- ¿Cuál es la importancia de la ética empresarial y la aplicación de los valores morales?

4.- ¿Que es un Código de ética empresarial?

5.- Enumerar los valores que deben están presente en un código de ética empresarial

6.- ¿Qué es la Responsabilidad social?

7.- Buscar ejemplos (por lo menos 4 ejemplos) en las paginas web sobre empresas multinacionales y la aplicación de su política de ética empresarial

TEMA

“ÉTICA EMPRESARIAL “

La ética empresarial es una rama de la ética aplicada. Se ocupa del estudio de las cuestiones normativas de naturaleza moral que se plantean en el mundo de los negocios. La gestión empresarial, la organización de una corporación, las conductas en el mercado, las decisiones comerciales, etc. La ética empresarial es una rama dentro de la ética que se encarga especial y excluyentemente de las cuestiones de índole moral que surgen o se plantean a instancias del mundo de los negocios y de las empresas.
“Rama de la ética que se ocupa de atender las cuestiones morales que surgen a instancias de la actividad empresarial” Cabe destacar que la ética es justamente aquella parte de la filosofía que justamente se ocupa de la moralidad de los actos de los seres humanos, y que por tanto de acuerdo a un patrón moral establecido y convenido, nos permite determinar los actos como buenos o como malos.
La ética empresarial como disciplina académica suele abarcar uno o más de los siguientes temas: el estudio de los principios morales aplicables a la vida económica y empresarial; el estudio y crítica de los valores efectivamente dominantes en el ámbito económico en general y en cada una de las organizaciones, el análisis de casos reales que ejemplifican la responsabilidad de las organizaciones y de sus diversos constituyentes; el desarrollo de cuerpos normativos voluntarios o procedimientos estandarizados de gestión basados en principios y valores éticos; el seguimiento y descripción de la importación de estos códigos y procedimientos en organizaciones concretas, así como la observación de sus efectos en las propias organizaciones y su entorno. También se ocupa con frecuencia la ética empresarial del estudio de las virtudes personales que han de estar presente en el mundo de los negocios. Se trata de mostrar que tales virtudes forman parte de la correcta comprensión de lo que es una buena vida para un directivo, para el grupo de personas que forman una organización o para la sociedad más amplia en que la organización misma se integra.
Temas en los que incursiona
Son tantísimos y variados los temas que atañen a la rama de la ética empresarial, entre los que destacan los siguientes: los principios morales inherentes a la actividad empresarial, los valores predominantes en el ambiente en general, y luego en cada caso en particular, desarrollo de guías normativas que estén basadas en preceptos morales que ayuden a guiar y rijan tanto la actividad de la empresa como la de sus miembros, la promoción e inculcación de los valores adoptados, entre otros.
Cabe destacarse que el comportamiento que observan los directores o aquellos individuos que despliegan un rol de liderazgo o de mando, en las organizaciones, es de vital importancia, ya que tendrá mucho que ver en la construcción de la ética empresarial.
Porque cuando los directores de x empresa observan actitudes y comportamientos que son éticamente conformes contagiarán y motivarán a sus empleados para que actúen de esa misma forma.
Poniéndolo en términos más sencillos, cuando desde arriba se practica con el ejemplo, los estratos más bajos absorben ese ideal y responden en esa misma dirección, y lo diametralmente opuesto sucederá si se actúa de manera esquiva, los empleados o subordinados no tenderán a identificarse ni con la empresa, ni con sus objetivos.
Entonces, cuando en cualquier empresa prima el respeto por los valores éticos es casi una condición sin equanom que nadie procederá en orden a corromperlos, mientras tanto, en aquellas organizaciones en las cuales los beneficios económicos son los únicos que mandan, ahí sí se tenderá a olvidarse del respeto de los principios morales.
La ética individual y la ética organizacional no pueden separarse tajantemente porque, al fin y al cabo, quienes realizan las tareas en las organizaciones son personas concretas con su ética privada y sus convicciones personales sobre qué se debe hacer en cada momento. Además, algunas de esas personas pertenecen a colegios o sindicatos profesionales, que imponen a sus miembros normas deontológicas estrictas a las que deben atenerse en su trabajo. Casi todas las grandes corporaciones han entendido que una organización responsable es algo más que una suma de personas virtuosos y profesionalmente íntegras. Así lo demuestra la historia de la ética corporativa, que en EEUU acumula ya varias décadas. (2) Hay muchas razones para plantearse la necesidad de una ética de las organizaciones como ámbito de estudio específico de la ética aplicada. Una de las más sobresalientes es que la ética corporativa ha de hacerse pública; no puede quedar como habitualmente sucede en las convicciones morales individuales, en el “fuero interno”.
Enfrentadas a sus responsabilidades, las organizaciones no pueden albergar “sentimientos” morales (culpabilidad, vergüenza, orgullo, sentido del deber) como les sucede a las personas que han tenido alguna educación moral. Las organizaciones han de responder a sus responsabilidades con decisiones colectivas Aunque las organizaciones las componen personas, y aunque el carácter personal de los directores tiene importancia decisiva en el perfil ético de las organizaciones, las responsabilidades corporativas no coinciden con las individuales, los métodos de decisión corporativas difieren de los personales, los principios y objetivos de las organizaciones están a veces por encima de las personas y los valores corporativos no tienen por qué identificarse con los valores personales de los miembros de la organización. En definitiva, la ética empresarial tiene componentes -los organizacionales- que la distinguen netamente de la ética individual.
No todo es ganancia, hay que respetar los valores morales Si se aspira a disponer de una empresa perdurable, sólida y que despierte confianza, será imprescindible destinarle tiempo y espacio al cultivo de los valores morales
No todo es facturar y facturar a como dé lugar, sin detenerse un momento a pensar en las necesidades y los objetivos de los empleados o de los consumidores que van más allá de satisfacerlos con un producto o servicio que se comercializa.
La clave del éxito de una empresa no radica solamente en vender y vender, sino que debe prestarle atención a los valores éticos para que el éxito sea completo. Aquella empresa que despliegue una política comercial en la cual se atiendan los valores éticos estará más que ninguna encaminada al éxito, en tanto, cuando hablamos de respetar estos valores, se incluye en ello a todos los actores sociales que intervienen en el juego comercial.
Cuando todos los integrantes de la empresa comprenden que la actividad debe estar supeditada al respeto de la ética no tardarán en surgir espontáneamente el sentimiento de unidad y de identificación personal con los valores que propone la empresa.
Cuando nada importa más que cumplir con los objetivos comerciales inevitablemente aparecerán conflictos internos, falta de identificación, entre otros, que por supuesto afectarán de manera directa el crecimiento y éxito de la organización
La empresa qué respeta los valores morales tendrá una imagen super positiva
Por otra parte, no podemos soslayar que saber que una empresa respeta y se ciñe a una ética impactará sobre la consideración que la sociedad se forme de ella, siendo altamente positiva en este sentido.
Trabajar siguiendo valores como la verdad, la transparencia y coherencia siempre será una ventaja sobre las empresas rivales, generando una imagen de credibilidad para el exterior y también para el interior, y la consecuente fidelidad de consumidores y empleados.
En tanto, los valores éticos que se cultiven, propongan y difundan deberán ser respetados y sostenidos a lo largo del tiempo, de nada vale asegurarlo un tiempo y luego priorizar la obtención de ganancias, además de generar confusiones, no tardarán en aparecer los problemas que antes indicamos.



¿Qué es el código de ética de una empresa?
Ética empresarial es el conjunto de valores, normas y principios reflejados en la cultura de la empresa para alcanzar una mayor sintonía con la sociedad y permitir una mejor adaptación a todos los entornos en condiciones que supone respetar los derechos reconocidos por la sociedad y los valores que ésta comparte. El código de ética es un referente formal e institucional de la conducta personal y profesional que deben cumplir todos los trabajadores, miembros de la Junta Directiva, proveedores y contratistas de una empresa, independientemente del cargo o función que ocupen.
Principios fundamentales de la ética empresarial
En una organización en la que la ética empresarial tenga cabida:
1- Justicia
2- Verdad. Los anuncios engañosos
3- Respeto: todos los miembros de la empresa:
4- Tolerancia: Libertad de la propia institución, los trabajadores, los proveedores, la competencia, los clientes, la comunidad y el medio ambiente. No Impedimento Físico. Respetar las necesidades y derechos de los empleados. Tener visión. Mantener una política contra el hostigamiento sexual
5- Seguridad: Mantener un ambiente seguro y saludable. Responsabilidad hacia el ambiente
6- Legalidad: principios éticos fundamentales.
Beneficios e importancia de la ética empresarial
Cumplir unas normas éticas tiene numerosos beneficios para las empresas, tanto internos como externos.
La aplicación de un código ético previene situaciones de riesgo, ya que los conflictos se tratan de solucionar en la propia empresa, antes de pasar a regularse por las leyes.
· Una empresa que toma en serio sus normas éticas genera mayor confianza en colaboradores, accionistas y clientes, ya que se la va a considerar más transparente.
· El código ético otorga uniformidad a la actuación de la empresa. Tanto su personal como sus colaboradores han de respetar los mismos principios.
Las empresas son cada vez más inteligentes y se han dado cuenta de que la mejor manera de atraer talento es hacer públicos unos valores éticos respetuosos con las personas. Esto hace que las personas más cualificadas estén deseosas de trabajar en dichas empresas.
Diferencias entre ética empresarial y responsabilidad social El número de empresas con un plan de responsabilidad social va creciendo cada día. De hecho, se conoce más el concepto de responsabilidad social que el de ética empresarial.
El concepto de responsabilidad social es más amplio. Se refiere al impacto en la sociedad de las actividades de las empresas. Un ejemplo muy claro de responsabilidad social de las empresas es el compromiso con el medio ambiente.